El Gobierno Socialista asalta por todo los flancos a las libertades del ciudadano, se cierran las fronteras, emisora de radios nacionales, televisoras, se atenta contra todos los medios de comunicación que se pronuncien contra el régimen, se bombardean los medios audiovisuales, radio e impreso de cualquier propaganda que legitime el régimen totalitarista, además de esto, se intervienen las industrias básicas del país, se atenta contra el derecho sindical de los obreros, y como si fuera poco se atentan contra las industrias de alimentos varios, y se interviene en la banca privada, además de eliminar la autonomía del Banco Central de Venezuela, alegando miles de argumentos el gobierno para legitimar estas acciones.
De igual forma, se interviene la educación en todos sus niveles, alienándola de toda la artillería socialista dispersa, valiéndose de la escasa visión de progreso y conformismo en algunas personas a raíz del debilitamiento del espíritud emprendedor y de la crisis de los valores por la que se atraviesa en las sociedades a nivel mundial.
El socialismo con todos estos controles que ha activado ha generado impunidad por un sinfín de delitos indetenibles en todos los sectores económicos de la sociedad. Esto debido a la estrecha relación que existe entre ciudadanos y las empresas privadas generadoras de empleo, riqueza, y capital humano, a las que ataca el gobierno con la única razón de desplomar la economía al punto de hacer dependientes exclusivo a la ciudadanía con el estado para instaurar progresivamente un clientelismo disminuyendo al máximo la iniciativa privada que pueda surgir en el país.
Además de todo esto, se atenta contra el derecho de representación proporcional en la ley electoral, lo que le resta espacios a las minorías y como es sabido una democracia se construye también con estas. Así mismo cada vez se hace más difícil el juego democrático en la nación, creando el escenario jurídico para la perpetuidad en el poder del mandatario, cuestión que no se le hace difícil al jefe de estado, ya que se perdió hace mucho tiempo la división de los poderes en el estado.
Por consiguiente, el Libre Mercado aun se encuentra desconocido para la sociedad en desarrollo debido a que se ocultan sus beneficios y se predican exacerbadamente sus anomalías ultrajadas cuyas consecuencias repercuten en la sociedad, trayendo como resultado sistemas totalitarios como los que padece Latinoamérica hoy.
El atentado contra los medios de comunicación es un golpe bajo del comunismo para aniquilar entre otras cosas no menos importante la economía interna y externa de los países, y evitar cualquier señal de autodeterminación de la ciudadanía dirigida al libre mercado y a su libre expresión creativa.
De nuevo regresan las Dictaduras a Latinoamérica, con todas estas políticas económicas y sociales lo que se pretende, a toda costa, es destruir la economía para instaurar el comunismo internacional; a diez años de la llegada del Dictador, todas las acciones del gobierno atenta férreamente contra la libre competencia, libertad económica, autodeterminación, libre creación, libre mercado que emancipan en toda su expresión la libertad humana de crear una vida más justa y digna.
El Dictador está repitiendo la misma novela de otros países donde se ha instaurado un gobierno socialista (Yugoslavia, Cuba, entre otros) con su misma receta, salvo ciertas variantes adaptadas a la época y a las exigencias de la ciudadanía y sus múltiples actores políticos.
De igual forma, se interviene la educación en todos sus niveles, alienándola de toda la artillería socialista dispersa, valiéndose de la escasa visión de progreso y conformismo en algunas personas a raíz del debilitamiento del espíritud emprendedor y de la crisis de los valores por la que se atraviesa en las sociedades a nivel mundial.
El socialismo con todos estos controles que ha activado ha generado impunidad por un sinfín de delitos indetenibles en todos los sectores económicos de la sociedad. Esto debido a la estrecha relación que existe entre ciudadanos y las empresas privadas generadoras de empleo, riqueza, y capital humano, a las que ataca el gobierno con la única razón de desplomar la economía al punto de hacer dependientes exclusivo a la ciudadanía con el estado para instaurar progresivamente un clientelismo disminuyendo al máximo la iniciativa privada que pueda surgir en el país.
Además de todo esto, se atenta contra el derecho de representación proporcional en la ley electoral, lo que le resta espacios a las minorías y como es sabido una democracia se construye también con estas. Así mismo cada vez se hace más difícil el juego democrático en la nación, creando el escenario jurídico para la perpetuidad en el poder del mandatario, cuestión que no se le hace difícil al jefe de estado, ya que se perdió hace mucho tiempo la división de los poderes en el estado.
Por consiguiente, el Libre Mercado aun se encuentra desconocido para la sociedad en desarrollo debido a que se ocultan sus beneficios y se predican exacerbadamente sus anomalías ultrajadas cuyas consecuencias repercuten en la sociedad, trayendo como resultado sistemas totalitarios como los que padece Latinoamérica hoy.
El atentado contra los medios de comunicación es un golpe bajo del comunismo para aniquilar entre otras cosas no menos importante la economía interna y externa de los países, y evitar cualquier señal de autodeterminación de la ciudadanía dirigida al libre mercado y a su libre expresión creativa.
De nuevo regresan las Dictaduras a Latinoamérica, con todas estas políticas económicas y sociales lo que se pretende, a toda costa, es destruir la economía para instaurar el comunismo internacional; a diez años de la llegada del Dictador, todas las acciones del gobierno atenta férreamente contra la libre competencia, libertad económica, autodeterminación, libre creación, libre mercado que emancipan en toda su expresión la libertad humana de crear una vida más justa y digna.
El Dictador está repitiendo la misma novela de otros países donde se ha instaurado un gobierno socialista (Yugoslavia, Cuba, entre otros) con su misma receta, salvo ciertas variantes adaptadas a la época y a las exigencias de la ciudadanía y sus múltiples actores políticos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario