El estatismo del socialismo lo acapara todo, los más triste es que la mayoría de los intelectuales en éste país piensan para el socialismo socialismo, en los cerros no hay gobierno, allí reina un clima de anarquía y maldad infernal, la infraestructura se encuentra en su estado mas decadente, el bombardeo propagandístico de corte socialista es tan grotesco, y monstruoso a decir verdad, que pudiera compararse a los edictos de cualquier rey absolutista del siglo XV.
En la capital no hay solución al problema político que enfrentan los venezolanos, ya que piensa el ciudadano común de la capital salir del gobernante actual, mas nunca piensan en deslastrase del socialismo.
Los asesores del autócrata, bordean todo el pulpito, definitivamente éste asumió ahora, la figura caudillista de Ezequiel Zamora, uno de las existencia del presidente actual, según lo afirman ciertos espiritualistas de Venezuela, y los hechos hablan por sí solos, el se cree Zamora, y ciertamente así lo siente.
Entre Zamora y el actual retorno hay varias combinaciones, ambos son militares, nacidos en Barinas-Venezuela, resentidos por complejos en su vida, ambiciosos, oportunistas que supieron utilizar el resentimiento de los pobres en pro de sus egoístas planes políticos, uno y otro estuvieron siempre rodeados de detentadores del poder, y ambos se les divisa un final oscuro que trae sus consecuencia en todas los engaños y conjuras en la que participaron en pro de las autocracias disfrazadas siempre de independencia.
La ignorancia es el peor enemigo de esta humanidad que presume de saberlo todo, ciertamente los venezolanos no saben a quién tienen por gobernante y aun sabiéndolo, esto no cambiaria en mucho, ya que lo que tiene ensartados a los venezolanos en éste abismo no es un caudillo del s. XIX, sino las ideas con las cuales se engaña y confunde a la ciudadanía de que es posible un socialismo humanista que promueva el desarrollo de los ciudadanos y por ende del país, cosa que ni en teoría es verdad.
Según información de fuentes espirituales, el retorno de éste caudillo que usurpa el cargo de presidente democrático de los venezolanos, representa su ultima existencia, es decir, esta personalidad representa la última existencia del ciclo de existencias destinadas a un mortal, por lo que , ya se le agotó el tiempo al caudillo, para posteriormente sumergirse en los infiernos atómicos de su propia inconsciencia, y así pagar todo el daño que le ha hecho a la humanidad, por el cual ha contribuido a la degeneración de la raza.
También se debe estar al tanto que en éste tiempo todas las leyes que se han aprobado desde la constitución de 1999., hasta una sencilla ley, todas sirven, nada más que para legitimar el despotismo caudillista zamorano, que arremete contra todo lo que se encuentre a su paso, a través, de la expropiaciones ilegitimas, que no son más que robos por parte del gobernante, ya que muchas veces no hay indemnizaciones de esas mal llamadas expropiaciones, confiscando la misma libertad ciudadana, si es posible con tal de no detener el proyecto absolutista, que abandera el socialismo.
El delirante mandatario, en su desenfrenada campaña socialista, no vacila en tergiversar la historia, incluso la religión si es necesario para confundir a la ciudadanía que ignora todo lo que lo mueve en su proyecto absolutista de gobierno.
En uno de esos tantos mítines donde el gobernante asume la figura de Zamora se aprecia la defensa pretoriana de campesinos armados con fusiles de frente a la audiencia, entrenados para defender al líder contra cualquier arremetida de la sociedad contra el absolutismo reinante, y no deja de descartarse la idea de que esos fusiles arremetan contra la ciudadanía que una vez lo impulso a estar ahí, y que ahora traicionada busca derribarlo del poder que se le confirió.
Cada día que pasa, Hay menos gente, seguidora de sus campañas políticas, y los que asisten, ya lo hacen más por el compromiso económico, que ideal, a estos, los delata el lenguaje gestual de descontento en su mayoría, mas esto ante tanto poder que exhibe el caudillo no representa nada para derrocarlo.
Sus asesores no se esperan en ninguno de los mítines del oligarca que concurra tan poca gente de la esperada, los espacios se encuentran vacios y son llenados con trucos de cámara, que no logran convencer a ninguno de los asistentes, que aprecian que cada día el discursó del mandatario se desgasta mucho mas.
La capital de Venezuela está podrida, su infraestructura, su gente cada vez mas decadente, su polución, su cultura, la música, lo que leen, todo huele a miseria, suburbio, el ambiente degradado inclusive su clima, hasta más no poder.
A pocos 100 metros de la función mediática del mandatario que rinde culto a la personalidad del difunto caudillo Zamora, todo concurre en completa normalidad capitalina, muy pocos son los que quieren voltear su mirada hacia donde está presente el cabecilla del gobierno.
Mientras éste no titubea en señalar a lo lejos, que allá están los burgueses que sólo existen por estos lados en su mente, ya que el sujeto ha mantenido y subyugado a todos a un clima de pobreza donde nadie puede tener más dinero y más poder, ni siquiera cerca al del autócrata, al lado de él.
Entre tanto discurso y discurso, cada vez más, es mar parco y repetitivo todo lo que dice, él como líder, lo sabe, lo huele, lo sospecha, pero no puede hacer nada, ya que se encuentra totalmente dormido y desconoce como despertar, para él ya están cerrado los misterios de la magia del poder, ahora sólo cuenta con la tiranía, para su desgracia, es otro equivocado sincero que cae en las fauces de su propio destino.
Caracas 20 de Febrero de 2,010.